Un icono de la guerra civil
Este puente sobre el río Bidasoa fue encargado por el Ayuntamiento de Irun al constructor Salvador de Azúa e inaugurado en noviembre de 1915.
Formado por una estructura de vigas metálicas, sobre la que descansa el tablero, cuenta con una interesante barandilla de hierro forjado.
A su valor como obra de ingeniería se une la significación que tiene para la localidad guipuzcoana: fue utilizado por miles de personas que abandonaron el Irun asolado por la guerra civil.
Ha sido declarado monumento en 2012.