El hierro del monte Arraiz

En las faldas del monte Arraiz, en Bilbao, se explotaron yacimientos de hierro desde 1869. La extracción se hacía en galerías subterráneas, a las que se accedía mediante planos inclinados.

Los restos más visibles del conjunto son los dos hornos circulares de ladrillo que se conservan en terrenos de la incineradora Zabalgarbi, construidos en 1897. Además, en las laderas del Arraiz quedan algunos elementos dispersos, como un horno de planta cuadrada, una vertedera y un plano inclinado.

Aquí estuvo también el primer tranvía aéreo de cierta importancia construido en Bizkaia (levantado en 1881 por McLennan, Latorre y Garay). Llevaba el mineral hasta los muelles de carga de Zorrotza, en la ría del Ibaizabal-Nervión: allí todavía quedan las bases del cargadero donde terminaba.

La mina fue adquirida por José McLennan en 1909 y, tras terminar la actividad relacionada con el hierro, fue vendida a Cementos Lemona en 1949.

Por su importancia, este espacio minero tan próximo al núcleo urbano de Bilbao fue declarado monumento en 2012.