Decorativismo en ladrillo

El matadero municipal de Barakaldo fue diseñado en 1913 por el arquitecto Alfredo Acebal. El conjunto contaba con estancias dedicadas a la matanza y a la tripería, y en 1917 se le añadieron los servicios administrativos, obra de José M.ª Abans Echevarría.

Su distribución era muy funcional, sin por ello desprenderse de la ornamentación de las fachadas exteriores, con sus característicos recercos y decoraciones de ladrillo.

Tras una reforma de las instalaciones, este edificio industrial (que ha sido declarado monumento en 2012) tiene hoy una segunda vida como sede de la Escuela de Idiomas de Barakaldo.